
sábado, 26 de junio de 2010
¿Desesperación?

"Metros" sí, "Pisos", no!
Cuando observamos que en el proyecto de ordenanza de Rizzi se establecen alturas en la dudosa medida de "pisos" en lugar de "metros", no respondemos a un súbito capricho, sino a tratar de evitar abusos de este tipo: volvemos al edificio de Gutenberg esquina Cabrera, que, con la cursilería puesta al máximo, se llama "Brisas de Mogotes". Miren la foto y juguemos. ¿Cuántos pisos tiene este edificio?
¿Qué me dirían si les contesto que tal vez cuatro? Si, cuatro. Esto es porque los pisos son dobles. ¿Qué es esto? Bueno, revisemos el concepto que tenemos de "piso", porque en este caso, si uno observa desde la calle Gutenberg, podrá ver que dentro de los departamentos hay escaleras que conducen a otro nivel dentro de los mismos departamentos. Es decir, que un piso equivale, por su altura, a dos pisos. Al menos así lo muestra la inmobiliaria que comercializa el edificio en su página web:




Podemos ver que los departamentos tienen, dentro de la misma unidad, un nivel y otro al que se accede por medio de una escalera, como los micros de doble piso. Por eso, cuando las cámaras de la construcción de nuestra ciudad, a traves del proyecto de Rizzi dicen en el mismo "12 pisos", tal vez se hable de doce pisos como éstos, porque además de las otras ambigüedades del proyecto mencionado, y que ya hemos tratado en este blog, tal vez esos doce pisos equivalgan a veinticuatro. Todo eso se arreglaría si en el proyecto se determinara la altura máxima en metros, una medida mucho mas clara, en tanto el Sistema Métrico Decimal fue adoptado por la Argentina en 1877, precisamente, para que las medidas queden claras.
lunes, 21 de junio de 2010
Unas palabras del arquitecto Roberto Goycoolea Prado

"Antes que nada agradecer tu interés por el tema que comentas (las torres en Punta Mogotes) y que es otro ejemplo más de apropiación empresarial o privatización del espacio y bienes públicos. Lo que en definitiva sucede es que en la valoración de las actuaciones urbanas sólo se tienen en cuenta la rentabilidad económica inmediata (costo-beneficio de la intervención) pero no se valoran los muchos otros factores implícitos en toda actuación sobre el espacio habitable, como son la destrucción del paisaje, de patrimonio, de formas de ver y vivir, de oportunidades futuras, los riesgos ambientales, etc.
Entiendo que son estos elementos "intangibles", por llamarlo de algún modo, lo que podrían sustentar la defensa de una situación como la que comentas. La tarea es dificil. En España estamos viviendo una situación similar en Valencia con la destrucción del barrio del Cabañal. Lo que en el fondo ocurre es la coalición, nada oculta, de políticos y empresarios para actuar con independencia de qué piensen los ciudadanos. Aquí la tarea parece perdida, pero se que en Sanitago de Chile, en el barrio de Vitacura, lograron parar la construcción de torres de vivienda obligando, juntando las firmas que la legislación establecía, a que el ayuntamiento realizase un referéndum sobre su implantación.
Resulta sorprendente que unas declaraciones de algo tan evidente (su nota en Página/12 y en este blog) hayan tenido el cierto revuelo que han tenido. El maltrato neoliberal a la ciudad (y a la sociedad, por lo que estamos viviendo) es enorme y en muchos caso irreversible; pese a ello, la deriva de las torres y de los edificios con formas cada vez estrafalarias y caras continúa y, lo peor, es la base de la enseñanza de nuestras escuelas. Acabo de estar en un congreso académico sobre el tema y he vuelto intranquilo, por no decir asustado, de la exclusiva predominancia de la explotación formal como único recurso arquitectónico."
Entiendo que son estos elementos "intangibles", por llamarlo de algún modo, lo que podrían sustentar la defensa de una situación como la que comentas. La tarea es dificil. En España estamos viviendo una situación similar en Valencia con la destrucción del barrio del Cabañal. Lo que en el fondo ocurre es la coalición, nada oculta, de políticos y empresarios para actuar con independencia de qué piensen los ciudadanos. Aquí la tarea parece perdida, pero se que en Sanitago de Chile, en el barrio de Vitacura, lograron parar la construcción de torres de vivienda obligando, juntando las firmas que la legislación establecía, a que el ayuntamiento realizase un referéndum sobre su implantación.
Resulta sorprendente que unas declaraciones de algo tan evidente (su nota en Página/12 y en este blog) hayan tenido el cierto revuelo que han tenido. El maltrato neoliberal a la ciudad (y a la sociedad, por lo que estamos viviendo) es enorme y en muchos caso irreversible; pese a ello, la deriva de las torres y de los edificios con formas cada vez estrafalarias y caras continúa y, lo peor, es la base de la enseñanza de nuestras escuelas. Acabo de estar en un congreso académico sobre el tema y he vuelto intranquilo, por no decir asustado, de la exclusiva predominancia de la explotación formal como único recurso arquitectónico."
sábado, 19 de junio de 2010
Construyendo nuestra identidad: Planificación participativa para los marplatenses

En estos últimos días la ciudad ha comenzado a discutir y a movilizarse desde diferentes sectores en relación a su patrimonio histórico y a su identidad. Se ha logrado evadir la intención de desafección del inmueble “Villa Rocca” ubicado en Belgrano e Hipólito Yrigoyen donde actualmente se encuentra la Mueblería Robert aunque, por otra parte, hemos sido testigos del voto favorable por parte del Concejo Deliberante sobre la desafección y demolición del Chalet San José, de Boulevard Marítimo y Bernardo de Irigoyen. Había sido declarado de interés patrimonial en 1995, cuando se aprobó y reglamentó el Código de Preservación Patrimonial. Nuestra historia con amplios movimientos migratorios, una identidad que se encuentra pluralmente arraigada en cuestiones vinculadas a la naturaleza propia de una ciudad balnearia y turística y un programa político errático entre 1995 y le fecha son elementos que permiten ponderar la discusión sobre patrimonio histórico e identidad en Mar del Plata. Cuando se piensa en términos de patrimonio, muchas veces se hace referencia a aquello que resulta emblemático y no sobre lo cotidiano. Por ello, pensar desde la apropiación del patrimonio histórico, entendiendo los usos sociales que relacionan esos bienes con las necesidades de ciertos grupos acortaría la distancia entre la comunidad y el patrimonio. La posibilidad de selección de lo que será el patrimonio de nuestra sociedad es lo que va a determinar, a fin de cuentas, esta distancia. Desde aquí repensamos la idea de patrimonio resultando un fruto del consenso y de la identidad social y no una resolución de un grupo hegemónico. De este modo, nos inscribimos en una forma de pensar la cultura diferente a la que solemos escuchar. La cultura ya no como totalidad de un modo de vida, ni como entidad estática y hegemónica sino que la comenzamos a comprender desde el concepto de lo plural, de la diversidad propia del mundo histórico. No se trata de una cualidad inmutable desde el principio de los tiempos, sino de una construcción del presente que regenera el pasado en la búsqueda de un futuro posible. Aquel eje totalizador que respondió en la modernidad con paradigmas vigentes que señalaban un solo rumbo posible, paradójicamente, se encontraba casi negando la real intervención de los hombres sobre su propia existencia. Hoy, a la luz de esta interpretación de lo social, nos permite analizar objetivamente procesos de estructuración social prestando la debida atención a las representaciones y las subjetividades individuales, al lugar del hombre, a la apropiación que el mismo pretende realizar de su patrimonio arquitectónico. Entonces si redefinimos la idea de cultura, tenemos que seguir por la misma línea el concepto de identidad que como construcciones simbólicas que involucran representaciones y pertenencias comprendemos, también, desde lo plural, lo cambiante, lo múltiple. Y, en este sentido, Garcia Clanclini aclara que no podemos pensar que esta multiplicación es libertad irrestricta o indeterminación sino algo propio del crecimiento urbano de las ciudades del mundo, donde el desafío resulta volver el mundo traducible para convivir en la diversidad. Una ciudad con características migratorias y una complejidad creciente son factores que deben permitirnos el salto cualitativo de cualquier polarización, costumbre política argentina. Ni tradicionalismo sustancialista, donde la evaluación de los bienes históricos es solamente a través del valor que conllevan en sí mismos, considerando que han desaparecido experiencias sociales y el trabajo de quienes los produjeron y el pasado desvanecido sobrevira a través de los bienes que lo rememoran; ni mercantilismo en el cual los bienes acumulados por la sociedad importan en la medida si favorecen o retardan el avance material y cualquier inversión para recuperar patrimonios se justifica si cotiza en el mercado.
Una perspectiva participativa podría ser el comienzo de la salida en la cual el accionar del Estado y su interacción con los actores sociales se desarrolle en un proceso abierto de aprendizaje en forma compartida entre sector público, sociedad civil y comunidad académica. Esta búsqueda debería estar planteada en forma concertada por un conjunto de personas y organizaciones heterogéneas diferenciándose de la concepción tecnocrática del paradigma tradicional de planificación donde el acceso al conocimiento sobre prioridades y necesidades de la población meta se podía plantear a través de los técnicos asociados al caso. Así, la idea de cultura, la construcción de identidad posterior y el paradigma de planificación participativa tienen elementos subyacentes compartidos en tanto la selección de qué y cómo se preserva se realiza por medio de un proceso democrático en el que intervengan interesados y se consideren sus hábitos y opiniones. Esta forma de planificación esta conjugando la diversidad, buscando consensos y construyendo la identidad lejos de los emblemas patrimoniales o los tecnicismos en una interacción con los grupos sociales interesados en la construcción de un espacio de pertenencia local. Entonces, si la construcción cultural local que abarca mezclas interculturales en función de sus conocidos movimientos migratorios y, en este mismo sentido, si la identidad se comprende desde la pluralidad de pertenencias en una construcción simbólica del hombre, son estos grupos sociales interesados en esta identidad local los que deben ser escuchados en la producción del patrimonio histórico marplatense.

Una perspectiva participativa podría ser el comienzo de la salida en la cual el accionar del Estado y su interacción con los actores sociales se desarrolle en un proceso abierto de aprendizaje en forma compartida entre sector público, sociedad civil y comunidad académica. Esta búsqueda debería estar planteada en forma concertada por un conjunto de personas y organizaciones heterogéneas diferenciándose de la concepción tecnocrática del paradigma tradicional de planificación donde el acceso al conocimiento sobre prioridades y necesidades de la población meta se podía plantear a través de los técnicos asociados al caso. Así, la idea de cultura, la construcción de identidad posterior y el paradigma de planificación participativa tienen elementos subyacentes compartidos en tanto la selección de qué y cómo se preserva se realiza por medio de un proceso democrático en el que intervengan interesados y se consideren sus hábitos y opiniones. Esta forma de planificación esta conjugando la diversidad, buscando consensos y construyendo la identidad lejos de los emblemas patrimoniales o los tecnicismos en una interacción con los grupos sociales interesados en la construcción de un espacio de pertenencia local. Entonces, si la construcción cultural local que abarca mezclas interculturales en función de sus conocidos movimientos migratorios y, en este mismo sentido, si la identidad se comprende desde la pluralidad de pertenencias en una construcción simbólica del hombre, son estos grupos sociales interesados en esta identidad local los que deben ser escuchados en la producción del patrimonio histórico marplatense.
Dos esquinas codiciadas

jueves, 17 de junio de 2010
Una buena: aceptaron incluir nuestras observaciones en el proyecto de las torres

martes, 15 de junio de 2010
Ejemplos que no se cumplen

jueves, 10 de junio de 2010
La reunión del lunes pasado: Muy bien!
La reunión del pasado lunes 7 en la Sociedad de Fomento del barrio fue bastante fructífera. Además de que siempre es bueno juntarnos, debatir y exponer lo que nos ocurre, llegamos a una serie de conclusiones válidas a fin de enfrentar el tema de las torres. Tal vez no sea este el lugar para revelar los próximos pasos, pero todos estuvimos de acuerdo en difundir el problema, crear conciencia en los vecinos y encarar distintas acciones a nivel municipal y de movilización. Pero es bueno que sepan que estamos en guardia y es bueno que nos sigamos nucleando, conociendo, charlando para resolver estos problemas. Por lo pronto, la cosa sigue el próximo lunes 14 a las 18 en la misma Sociedad de Fomento, Lebensohn 2250 y terminar de definir propuestas. Como siempre, los esperamos a todos.
viernes, 4 de junio de 2010
Vilma nos hizo ¡Ole!

Postnota: Hoy, sábado 5 de junio, en diálogo radial con Daniel Temperoni en Radio Brisas, Vilma enumeró los temas salidos de la Jornada y citó textual "...surgieron temas con las torres de Punta Mogotes planteados por la Sociedad de Fomento y vecinos del sector..." Al menos en un medio lo incluyó. Esperemos que así sea en otros ámbitos.
La muerte del actor Juan Carlos Stebelski a causa de una obra en construcción ¿Accidente o negligencia cómplice?

Y sus amigos aseguraron que: “ ninguno de los responsables de la obra, arquitectos, empresa constructora; absolutamente nadie se hizo presente, al menos para saber sobre el estado de salud del artista”. Por supuesto que se iniciaron las correspondientes acciones legales.

Pero a poco de sucedido el hecho pasamos por la obra en cuestión y en el cartel de obra nos llamó la atención el nombre de una arquitecta: M. Luz Palópoli. Si bien no es la responsable de la seguridad de la obra, nos llamó la atención el apellido ¿tendrá algo que ver con Oscar Palópoli, el ex presidente del Centro de Constructores y creador del concepto del "Pan lactal parado" sobre el que escribiera el amigo Barañano y de fácil llegada al intendente? ¿Será su hija? Buscando en Internet encontramos la constitución de una sociedad que, si bien no es la que figura como constructora del edificio, se llama igual que el mismo e incluye a Palópoli y a la nena: "EDIFICADORA ANDROS S.A. POR 1 DIA. - Oscar C. Palopoli, divorc. 28-8-47, Cr. 8706062, María Laura Palopoli, Cda. 20-11-77, arquitecta, 23346094 y María Luz Palopoli, solt. 16-1-79, arquitecta, 27185011, args. c/ dlio. Victoriano Montes 1438 M. del Plata, 7-1-08, Edificadora Andros S. A. Av. Colón 3071, P° B Mar del Plata, G. Pueyrredón, constructora de obras civiles, de ingeniería, arquitectura, Inmob. Cpra. Vta,. de inmuebles, Fciera., salvo L. 21526, 99, 12000, Drio. 1/5 Dts. y 1/3 Sts. Pte. Oscar Palopoli, DS. M. Luz Palopoli x 3 ej. Fisc. Socios. 31-12. Francisco Warner, Abogado."

(Lean, por favor en los comentarios, el que nos envió Marcos Stebelski, hijo de Juan Carlos, confirmándonos que María Luz Palópoli es hija de Oscar Palópoli)
jueves, 3 de junio de 2010
Pedimos a Pulti que suspenda obras en altura en Mogotes y la demolición de casas históricas

Vean la nota en: http://www.0223.com.ar/detalleNoticia.php?idNoticia=25373
http://www.puntonoticias.com/noticias.php?idArt=4351#Scene_1
martes, 1 de junio de 2010
"MAR del Plata" empieza igual que "MARbella", verdad?
Cuando en programas de chimentos o revistas del corazón se hablaba de que el novio de la cantante Isabel Pantoja estaba preso, nadie acierta a explicar porqué motivos fue a dar tras las rejas. Es hora de que lo digamos: Julián Muñoz, ex alcalde de Marbella encabezaba una organización conformada por legisladores, empresarios inmobiliarios y políticos varios que se encargaba de cambiar indicadores urbanos para permitir construir prácticamente sobre cualquier lugar de su municipio. Pero no fue el único que fue apresado. A continuación reproducimos una nota del diario La Nación de Buenos Aires, del 5 de abril del 2006, donde se cuenta la trama. Ante cualquier similitud, nos preguntamos si MAR del Plata empieza igual que MARbella. ¿Terminaremos igual?
MARBELLA, DE PARAISO DEL JET SET A REINO DEL FRAUDE: EL GOBIERNO ESPAÑOL DISOLVIO EL MUNICIPIO POR LA CORRUPCION.
MADRID.- La mafia tiene estas cosas: algún día explota. Y con tanta onda expansiva que, por primera vez en 30 años de democracia, el gobierno español dispuso la "disolución" del Ayuntamiento de la riquísima ciudad balnearia de Marbella, envuelto en una interminable trama de corrupción por la que están presas buena parte de sus autoridades.
En Marbella ya no queda casi nadie, luego de que la Justicia metió mano en una caja de Pandora (con agujeros por más de 2400 millones de euros) y, de la alcaldesa para abajo, envió a la cárcel a medio mundo. Ante semejante desierto de funcionarios, el gobierno nacional de José Luis Rodríguez Zapatero se hará cargo de la situación y nombrará una "gestora" para que conduzca el municipio hasta nuevas elecciones.
Lo de Marbella "riquísima" es un decir. Porque si bien es cierto que la ciudad del jet set está saturada de suntuosas mansiones (entre ellas, una que es copia de la Casa Blanca), el Ayuntamiento está técnicamente "quebrado". Eso, después de que lo esquilmó una trama comunal que lo dejó, según fuentes judiciales, sin un euro "para comprar jabón".
La actividad de estos entrepreneurs que llegaron, en mayoría, por el voto popular, reconoce como eje de sus negociados el boom inmobiliario, con predilección por dos variantes delictivas: la especulación y el cobro de comisiones ilegales a cambio de licencias para construir donde fuera, sin distinción de inhibiciones reglamentarias. En tal caso, era cuestión de hablar de precios.
La historia tiene puntos reiterativos. Entre ellos, las mujeres rubias y de belleza parecida (gracias a la química y a la cirugía) que encarnan la ex alcaldesa Marisol Yagüe y su adjunta, Isabel García Marcos. A ambas el estallido las tomó absolutamente por sorpresa: la primera, cuando se reponía de otra cirugía estética. La segunda, cuando volvía de su luna de miel y encontró un policía al pie del avión. Y no para darle la bienvenida.
Hay que reconocer, sin embargo, la coartada espectacular de la señora adjunta. Es que doña Isabel llegó a esa posición nada menos que con el voto popular de quienes vieron en ella una especie de "azote republicano" para el ex alcalde Jesús Gil -inspirador de toda la trama-, a quien se cansó de denunciar por fraude y corrupción. Claro que, una vez en el poder, "la rubia transmutó", como dicen en Marbella, con el latiguillo adicional de que "no hay peor corrupto que el que se esconde en la idea de luchar contra la corrupción".
El resto de la historia también parece sacado de un manual para guiones de cine. Para empezar, "el verdadero cerebro" de toda la operación es un hombre cuyo rostro pocos conocían, que no firmaba casi nunca nada y que ocupaba el rentable cargo de "asesor en materia urbanística" del Ayuntamiento.
Como informó LA NACION, se llama Juan Antonio Roca, hace 15 años no tenía trabajo y hoy posee mansiones por buena parte de la geografía española. La operación policial fue bautizada con el nombre clave de Malaya, y eso inspiró a la poesía popular, que, ante el fenomenal descabezamiento, añadió: "Quien queda, queda, y quien no, que se vaya". (...)
En lo que casi todos están de acuerdo es en que difícilmente los vecinos estafados de Marbella vuelvan a ver un centavo del monumental fraude.
Por Silvia Pisani Corresponsal en España
(Hay mas información sobre la "Operación Malaya" en http://es.wikipedia.org/wiki/Caso_Malaya)
MARBELLA, DE PARAISO DEL JET SET A REINO DEL FRAUDE: EL GOBIERNO ESPAÑOL DISOLVIO EL MUNICIPIO POR LA CORRUPCION.

En Marbella ya no queda casi nadie, luego de que la Justicia metió mano en una caja de Pandora (con agujeros por más de 2400 millones de euros) y, de la alcaldesa para abajo, envió a la cárcel a medio mundo. Ante semejante desierto de funcionarios, el gobierno nacional de José Luis Rodríguez Zapatero se hará cargo de la situación y nombrará una "gestora" para que conduzca el municipio hasta nuevas elecciones.
Lo de Marbella "riquísima" es un decir. Porque si bien es cierto que la ciudad del jet set está saturada de suntuosas mansiones (entre ellas, una que es copia de la Casa Blanca), el Ayuntamiento está técnicamente "quebrado". Eso, después de que lo esquilmó una trama comunal que lo dejó, según fuentes judiciales, sin un euro "para comprar jabón".
La actividad de estos entrepreneurs que llegaron, en mayoría, por el voto popular, reconoce como eje de sus negociados el boom inmobiliario, con predilección por dos variantes delictivas: la especulación y el cobro de comisiones ilegales a cambio de licencias para construir donde fuera, sin distinción de inhibiciones reglamentarias. En tal caso, era cuestión de hablar de precios.
La historia tiene puntos reiterativos. Entre ellos, las mujeres rubias y de belleza parecida (gracias a la química y a la cirugía) que encarnan la ex alcaldesa Marisol Yagüe y su adjunta, Isabel García Marcos. A ambas el estallido las tomó absolutamente por sorpresa: la primera, cuando se reponía de otra cirugía estética. La segunda, cuando volvía de su luna de miel y encontró un policía al pie del avión. Y no para darle la bienvenida.
Hay que reconocer, sin embargo, la coartada espectacular de la señora adjunta. Es que doña Isabel llegó a esa posición nada menos que con el voto popular de quienes vieron en ella una especie de "azote republicano" para el ex alcalde Jesús Gil -inspirador de toda la trama-, a quien se cansó de denunciar por fraude y corrupción. Claro que, una vez en el poder, "la rubia transmutó", como dicen en Marbella, con el latiguillo adicional de que "no hay peor corrupto que el que se esconde en la idea de luchar contra la corrupción".
El resto de la historia también parece sacado de un manual para guiones de cine. Para empezar, "el verdadero cerebro" de toda la operación es un hombre cuyo rostro pocos conocían, que no firmaba casi nunca nada y que ocupaba el rentable cargo de "asesor en materia urbanística" del Ayuntamiento.
Como informó LA NACION, se llama Juan Antonio Roca, hace 15 años no tenía trabajo y hoy posee mansiones por buena parte de la geografía española. La operación policial fue bautizada con el nombre clave de Malaya, y eso inspiró a la poesía popular, que, ante el fenomenal descabezamiento, añadió: "Quien queda, queda, y quien no, que se vaya". (...)
En lo que casi todos están de acuerdo es en que difícilmente los vecinos estafados de Marbella vuelvan a ver un centavo del monumental fraude.
Por Silvia Pisani Corresponsal en España
(Hay mas información sobre la "Operación Malaya" en http://es.wikipedia.org/wiki/Caso_Malaya)
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